La Cumbre del Clima es un evento que Naciones Unidas celebra cada año desde 1992 con el objetivo de estabilizar la concentración de gases de efecto invernadero en la atmósfera, a un nivel que no produzca interferencias peligrosas en el planeta. Este año la expectación es máxima porque existe una presión social sin precedentes por parte de la juventud y la activista Greta Thunberg.
Las cumbres más importantes fueron las de Kioto (Japón) en 1997, en la que se acordó una reducción de emisiones del 5% y el Acuerdo de Paris de 2015, en el que se estableció como meta limitar el aumento de la temperatura este siglo un máximo de 2ºC.
Se espera que la de este año sea también una de las que pase a la historia. El objetivo de esta cumbre COP25, que se celebra en Madrid, es lograr un acuerdo en el que se establezcan obligaciones para todas las naciones implicadas para combatir el cambio climático. La Cumbre pretende disparar la carrera entre los países para pasar a la acción y presentar planes climáticos más ambiciosos que deberán estar listos en 2020. Servirá para tomar el pulso a los gobernantes, saber quiénes están a favor de impulsar acciones efectivas para reducir los gases de efecto invernadero y quiénes reniegan del cambio climático.
Está claro que el ámbito político supone en su conjunto un actor principal en esta batalla. Pero la ciudadanía también cuenta con opciones para reducir la huella carbono que provoca con su actividad diaria y estilo de vida. ¿Qué se puede hacer?
Te proponemos 5 acciones que deberían formar parte de tu forma de vida y contribuirían a frenar el cambio climático.
- Utiliza el Transporte púbico, la bicicleta o camina.
Deja en casa el coche cuando sea posible y cámbialo por caminar, ir en bicicleta o transporte público. Vivir sin vehículo supone la disminución de 2,4 toneladas anuales de CO2 por persona.
- Reduce el consumo.
Reducir, reutilizar y reciclar, la regla de las tres erres fundamental para frenar el cambio climático. Primero pensar antes de consumir, después optar por la segunda mano o buscar opciones para lo que se vaya a prescindir y, en tercer lugar, separar los productos que sean reciclables con el fin de que no acaben en un vertedero sin tratar. No olvides separar la materia orgánica.
- Ahorra energía
Compra electrodomésticos de consumo energético eficiente. Según la OCU, el mayor gasto corre a cargo del frigorífico (662 kWh al año) y el congelador (563 kWh), que están siempre encendidos; la televisión (263 kWh); la lavadora (255 kWh); la secadora (255 kWh) y el lavavajillas (246 kWh). Sustituir un combi (frigorífico con congelador) de hace quince años por uno de alta eficiencia supone un ahorro económico de 120 euros anuales, según el estudio realizado por la Asociación Nacional de Fabricantes de Electrodomésticos (Anfel).
Pero, además, puedes aislar ventanas y puertas para aumentar la eficiencia energética: una vivienda puede ahorrar un 30% de energía con un buen aislamiento térmico. Recuerda que la calefacción debe estar entre 19 y 21 grados en invierno y que en verano es suficiente poner el aire acondicionado a 26 grados.
En lo referente a la iluminación, apaga las luces cuando no se necesiten y renueva las bombillas. Cerca del 7% de la energía consumida en casa tiene que ver con la iluminación. Además de sustituir las bombillas por otras de bajo consumo utiliza en lo posible la claridad natural.
- Limita el uso del plástico
Compra productos mínimamente envasados; lleva tu propia bolsa cuando vayas a comprar; utiliza botellas de agua y tazas de café que puedas reusar. El plástico que desechamos de forma irresponsable contribuye a dañar severamente el hábitat marino y mata un gran número de animales cada año.
- Apuesta por productos kilometro cero y de temporada
Cualquier alimento que se encuentre en el supermercado ha viajado, por lo general, centenares de kilómetros. Comprando productos de temporada y cercanos se reducen las emisiones que genera el transporte y se asegura la creación de riqueza en el entorno.
La lucha contra el cambio climático nos afecta y requiere nuestra acción: gobiernos, instituciones, empresas, organizaciones civiles y ciudadanía. Porque el planeta seguirá existiendo pero el ser humano como especia se puede ver muy perjudicado.
En nuestra mano está hacer cambios en nuestra vida diaria. La suma de esas medidas individuales generará un cambio. ¡Elige actuar!
Imagen: Markus Spiske. Unsplash
Deja una respuesta