Las 2200 botellas que se usaron, para la construcción del árbol fueron cedidas por Bodegas Pedrola, las cuales tras ser utilizadadas fueron lavadas y colocadas sobre la estructura de hierro desarrollada por el estudio de arquitectura Chocarro y Urmeneta de Pamplona. Una estructura de 6 metros de altura y 4,5 metros de diámetro en su base.

El jurado destacó del proyecto que es «honesto, imaginativo, sencillo y bien diseñado». Estos premios reconocen los mejores trabajos de iluminación en diseño de productos, proyectos e instalaciones en todo el mundo. En segundo y tercer lugar fueron seleccionadas una estructura espiral de reflejos, instalada en un edificio de las oficinas de Qatar y una cúpula giratoria instalada en el Holburne Museum de Sydney, respectivamente.

Para la realización de este proyecto, que estuvo instalado en la Plaza de Baluarte de Pamplona las pasadas navidades, la Mancomunidad de la Comarca de Pamplona contó con la colaboración del Ayuntamiento de Pamplona, FCC y Bodegas Pedrola, empresa dedicada a la recuperación de botellas de vino para su posterior reutilización.