Viladecans es una ciudad amiga de las abejas y cuenta con ellas para estudiar, vigilar y mejorar la calidad ambiental de la localidad. Con la miel que obtienen de sus tres colmenas urbanas agasajan al visitante, en la casa de las abejas desarrollan actividades para niños/as y mayores, y los alcorques y balcones de las viviendas lucen flores atractivas para que estos insectos polinizadores encuentren el manjar que buscan.